Fuente: indymedia. Autor: Luis R Delgado. Gustavo Machado uno de los padres del comunismo en Venezuela, cumple 110 aniversario de su natalicio este 19 de julio (nació en 1898), lo cual es motivo de celebración y alegría para los revolucionarios y revolucionarias de nuestro país.
Desde muy joven estuvo incorporado a la lucha anti-gomecista pese a pertenecer a una encumbrada familia a la cual no le faltaba nada, estando preso por primera vez a los 14 años. Esta actividad política le obligó salir del país tempranamente recorriendo durante la década de los 20 y 30 diversos países europeos y latinoamericanos, donde entró en contacto con diversos revolucionarios y luchadores políticos de talla histórica importante. Viajó a Francia donde cursó su carrera de abogado en La Sorbona, graduándose en 1924 en unión de Salvador de la Plaza y Pedro Zuloaga. Estos hechos lo ubicaron en la conformación de diversas organizaciones revolucionarias en el continente. Basta citar algunos elementos, es sabido que fue representante de Augusto Cesar Sandino en México, lo cual demostraba la confianza depositada en él por el líder nicaragüense. Junto a Salvador de la Plaza y siendo militante del Partido Comunista Francés, participó en la fundación del Partido Comunista cubano, donde tuvo un papel estelar el siempre presente Julio Antonio Mella, héroe de Cuba en sus caminos por la libertad y el socialismo. Es conocido sus contactos con José Carlos Mariátegui, Juan Marinello y Farabundo Martí para la conformación de una organización continental antiimperialista, la Liga Antiimperialista de las Américas. Posteriormente a mediados de los 30 Gustavo Machado regresa a su país para contribuir con la organización del Partido Comunista de Venezuela (PCV) cuyo primer organismo de base fue fundado en 1931 y celebró su I Conferencia Nacional el 8 de agosto de 1937. Antes de esto no podemos olvidar su participación temeraria en la toma de un fortín en Curazao, con un puñado de hombres armados a machete. Durante su breve estancia en el país es nuevamente expulsado y sólo retornará en 1944. En 1946 participa como representante en la Asamblea Constituyente. Dos años más tarde (1948) funda el periódico Tribuna Popular (órgano divulgativo del Comité Central del PCV), del cual fue director hasta su muerte, excepto desde 1951 a 1958, por su destierro del país y desde 1963 a 1968, por estar en el presidio. En 1951 la Dictadura de Pérez Jiménez lo expulsa del país, y sólo retornará a él en 1958 con la caída de dicha dictadura, ejerce funciones en el Congreso Nacional durante los primeros 4 años de periodo democrático. En 1963 el gobierno de Betancourt allana diversas casas de revolucionarios y ponen preso a Gustavo Machado hasta 1968, más de 4 años de presidio pese a ser para ese entonces un hombre que superaba los 65 años. A partir de alcanzar nuevamente su libertad ejerce responsabilidades parlamentarias las cuales combinaba con su dirección del Tribuna Popular pionero del periodismo revolucionario. Gustavo Machado quien muere el 17 de julio de 1983 es un ejemplo que perdura debido a que nunca renunció a sus ideales de lucha, a su internacionalismo, a su amor por los pueblos, por los trabajadores y trabajadoras del campo y la ciudad, nunca abandonó la perspectiva comunista. Como otros revolucionarios renunció a la riqueza de cuna y murió humilde, humilde pero querido por mujeres y hombres luchadores por la Patria y el Socialismo. Hoy cuando en Venezuela estamos viviendo estos tiempos convulsos y de cambios, desearíamos tener revolucionarios y revolucionarias de la estatura moral y política de Gustavo Machado, seguir su ejemplo y su camino trazado es la mejor forma de traerlo con nosotros permanentemente. Gustavo vive en la lucha del pueblo venezolano.
Desde muy joven estuvo incorporado a la lucha anti-gomecista pese a pertenecer a una encumbrada familia a la cual no le faltaba nada, estando preso por primera vez a los 14 años. Esta actividad política le obligó salir del país tempranamente recorriendo durante la década de los 20 y 30 diversos países europeos y latinoamericanos, donde entró en contacto con diversos revolucionarios y luchadores políticos de talla histórica importante. Viajó a Francia donde cursó su carrera de abogado en La Sorbona, graduándose en 1924 en unión de Salvador de la Plaza y Pedro Zuloaga. Estos hechos lo ubicaron en la conformación de diversas organizaciones revolucionarias en el continente. Basta citar algunos elementos, es sabido que fue representante de Augusto Cesar Sandino en México, lo cual demostraba la confianza depositada en él por el líder nicaragüense. Junto a Salvador de la Plaza y siendo militante del Partido Comunista Francés, participó en la fundación del Partido Comunista cubano, donde tuvo un papel estelar el siempre presente Julio Antonio Mella, héroe de Cuba en sus caminos por la libertad y el socialismo. Es conocido sus contactos con José Carlos Mariátegui, Juan Marinello y Farabundo Martí para la conformación de una organización continental antiimperialista, la Liga Antiimperialista de las Américas. Posteriormente a mediados de los 30 Gustavo Machado regresa a su país para contribuir con la organización del Partido Comunista de Venezuela (PCV) cuyo primer organismo de base fue fundado en 1931 y celebró su I Conferencia Nacional el 8 de agosto de 1937. Antes de esto no podemos olvidar su participación temeraria en la toma de un fortín en Curazao, con un puñado de hombres armados a machete. Durante su breve estancia en el país es nuevamente expulsado y sólo retornará en 1944. En 1946 participa como representante en la Asamblea Constituyente. Dos años más tarde (1948) funda el periódico Tribuna Popular (órgano divulgativo del Comité Central del PCV), del cual fue director hasta su muerte, excepto desde 1951 a 1958, por su destierro del país y desde 1963 a 1968, por estar en el presidio. En 1951 la Dictadura de Pérez Jiménez lo expulsa del país, y sólo retornará a él en 1958 con la caída de dicha dictadura, ejerce funciones en el Congreso Nacional durante los primeros 4 años de periodo democrático. En 1963 el gobierno de Betancourt allana diversas casas de revolucionarios y ponen preso a Gustavo Machado hasta 1968, más de 4 años de presidio pese a ser para ese entonces un hombre que superaba los 65 años. A partir de alcanzar nuevamente su libertad ejerce responsabilidades parlamentarias las cuales combinaba con su dirección del Tribuna Popular pionero del periodismo revolucionario. Gustavo Machado quien muere el 17 de julio de 1983 es un ejemplo que perdura debido a que nunca renunció a sus ideales de lucha, a su internacionalismo, a su amor por los pueblos, por los trabajadores y trabajadoras del campo y la ciudad, nunca abandonó la perspectiva comunista. Como otros revolucionarios renunció a la riqueza de cuna y murió humilde, humilde pero querido por mujeres y hombres luchadores por la Patria y el Socialismo. Hoy cuando en Venezuela estamos viviendo estos tiempos convulsos y de cambios, desearíamos tener revolucionarios y revolucionarias de la estatura moral y política de Gustavo Machado, seguir su ejemplo y su camino trazado es la mejor forma de traerlo con nosotros permanentemente. Gustavo vive en la lucha del pueblo venezolano.
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